La ley es para cumplirla, señora Maria Isabel Requena
Andamos por aquí abajo preocupados por las noticias que nos cuentan de más al norte, sobre las nuevas afrentas que debe soportar la bandera de España, uno de los símbolos de todos los españoles, desde la llegada de los filobatasunos a ayuntamientos y diputaciones en el País Vasco.
La última era la polémica provocada por si la bandera de España colocada en el Ayuntamiento de San Sebastián, que anteriormente había sido retirada, ahora estaba atada o enrollada; estratagema con lo que los de Bildu trataban de bordear la ley, al tener la bandera de España colocada en cumplimiento de la ley de banderas y por otro lado no verse, que e era lo que realmente pretendían los filobatasunos.
Pero resulta que no tenemos que irnos muy arriba para que los almerienses podamos vivir en primera persona una de esas “guerras de banderas” a las que tan desgraciadamente nos hemos acostumbrado en España.
Y es que desde hace ya bastante tiempo, meses según me cuentan, algo se echa de menos en la fachada del edificio de lo que antes era la Delegación Provincial de la Consejería de Justicia de la Junta de Andalucía de Almería, sito en la calle Alcalde Muñoz, y que con tantos cambios en el organigrama de la Junta de Andalucía no sabemos lo que es, porque hasta hoy se sigue manteniendo la placa que estaba antes de la reestructuración de la Junta, donde fusionaba las consejerías de Gobernación y de Justicia en una. Exactamente, la bandera de España.
Incomprensiblemente la bandera de España ha dejado de ondear en un edificio oficial de la Junta de Andalucía, y ya son semanas y semanas sin que ningún responsable dé una solución y cumpla con lo estipulado por ley.
Desconozco el motivo por el que la bandera de España no está colocada en este edificio de la Junta de Andalucía junto a la andaluza, que si lo está. ¿Será un descuido? ¿Un error? ¿Acaso algunos vándalos la han destrozado y no se ha repuesto? No se sabe, pero lo que sí sabemos es que la ley obliga a que esté, en este caso la ley 39/1981, de 28 de octubre, por la que se regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas y que claramente dice en su artículo tercero uno lo siguiente: “La bandera de España deberá ondear en el exterior y ocupar el lugar preferente en el interior de todos los edificios y establecimientos de la Administración central, institucional, autonómica provincial o insular y municipal del Estado.”
Está pues nítidamente claro que la bandera de España debe aparecer junto a la andaluza en cualquier dependencia o edificio de la Junta de Andalucía, además ocupando el lugar preferente.
A pesar de ello la máxima responsable de la Junta de Andalucía en nuestra provincia, la delegada de Gobierno de Almería María Isabel Requena Yánez, no se da por enterada y consiente que se siga incumpliendo con la ley, precisamente la que ostenta la máxima responsabilidad en Almería.
Desde este medio ya se ha denunciado en repetidas ocasiones el incumplimiento de la ley de banderas por parte de la Junta de Andalucía de Almería, pero nadie parece haberse dado por enterado, aunque algunos funcionarios que desempeñan su trabajo en dicho edificio han confirmado a TAN que el tema está en conocimiento de los responsables.
El hecho es público, los responsables lo saben, la ley en clara en tal sentido y nadie parece preocupado porque se cumpla la legislación vigente. Se trata ahora de averiguar los motivos reales.
Señora María Isabel Requena Yánez, delegada del Gobierno en Almería, debería usted dar instrucciones claras y concisas para que la bandera de España vuelva a ser colocada en una dependencia bajo su responsabilidad directa, y en caso contrario ser valiente y dar explicaciones urgentes sobre este hecho, si es que no está de acuerdo en que la bandera de España ondee en los edificios dependientes de la Junta de Andalucía díganoslo claramente a los almerienses, pronto tendemos unas elecciones nacionales y después unas autonómicas y todo ello nos sirve para valorar a quien votar y a quien no. Además todos sabemos la tipificación que tiene judicialmente conocer la ley y a sabiendas no cumplirla, lo que debería levantar todas las alertas del PP que debería ir tomando cartas en este asunto a simple vista trivial pero con más calado político de lo que aparenta.