Almería capital volvió a recuperar el culto católico externo
Nuestro Padre Jesús de Salud y Pasión en su Tercera Caída ha sido venerado por miles de almerienses que se acercaron a presenciar el cortejo procesional de alabanza.
Hace unos días, desde la Casa Consistorial, con la presencia del canónigo prefecto de liturgia y cura – párroco de la Iglesia parroquial de Santa Teresa de Jesús, Muy Ilustre Victoriano Montoya Villegas, el Concejal de Promoción de la Ciudad, Carlos Sánchez López, y el Hermano Mayor de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús de Salud y Pasión en su Tercera Caída y María Santísima de los Desamparados (Pasión), Andrés Cleofás Alonso Alonso, presentaron a la ciudad almeriense y a toda la provincia, la primera de las procesiones de alabanza, que iba a llevarse puro y debido efecto en la capital almeriense, tras el levantamiento de las restricciones sanitarias y con motivo pastoral de la efeméride del XXV aniversario fundacional de esta corporación cofrade penitencial, al no haberse podido realizar el año pasado tal y como se tenía previsto para el día 26 de septiembre. Señalar este gesto municipal de la presentación del cartel anunciador de esta efeméride, que viene a poner de manifiesto la firmeza en la colaboración y cooperación con la comunidad cofrade de la corporación municipal presidida por el alcalde de la ciudad Ramón Fernández – Pacheco Monterreal.
En cumplimiento de lo dispuesto por el Obispo coadjutor, Monseñor Antonio Gómez Cantero, mediante Decreto de 16 de septiembre del actual, mediante el cual, entre otras cuestiones, se permiten las celebraciones de culto externo, llegado el ocaso del día de la salida del cortejo procesional, 25 de septiembre, día soleado otoñal pero caluroso con 27 grados a la sombra; sábado XXV del tiempo ordinario con las lecturas de Zacarias 2, 5-9, Jeremías 3 y el Evangelio de Lucas 9, 43-45, “Al Hijo del Hombre lo van a entregar en manos de los hombres”, desde la Iglesia parroquial de Santa Teresa de Ávila.
Tras la celebración con solemnidad la Santa Misa de Acción de Gracias, a las 18:00 horas, ocupando la sagrada cátedra y predicando la palabra de Dios nuestro querido Obispo diocesano, Monseñor Adolfo González Montes, comenzó el cortejo procesional por las calles y plazas de la feligresía con la sublime imagen sagrada de Nuestro Padre Jesús de Salud y Pasión en su Tercera Caída, la cual iba precedida por los portadores de ciriales, ceroferarios, pertiguero y acólitos turiferarios.
Magistral Imagen tallada, salida de la providencial gubia del escultor imaginero, Luis Álvarez Duarte, q.e.p.d., la cual en el interior de la misma se recoge lo invisible de lo divino, lo que sólo la fe con una actitud piadosa se pueda entrever y recoger tan excelsa efigie con el fervor y devoción de sus hermanos cofrades y demás fieles y devotos diocesanos, todas las oraciones y rezos silenciosos, que en la multitud de personas que se congregaban a lo largo del recorrido fijado para la ocasión iban interiormente lazándoselas como rojos pétalos al bendito corazón de Jesús, que iba portado con unas sobrias y austeras andas por hermanos de la Cofradía de Pasión.
Se han visto como al pasar el Señor de Pasión a pie de calle, las gentes que les esperaban con el corazón contrito, ante las punzadas de dolor de la vida, muchos enfermos y necesitados, se persignaban con unción y muchas de ellas inclinaban la cabeza o realizaban corporalmente una genuflexión como máximo respeto de veneración a Cristo, al mostrarnos tan cerca el Amor de Dios.
Cortejo procesional, que bajo la dirección espiritual del capitular Montoya Villegas y el diputado mayor Ricardo Salvador, se configuró este hecho de la religiosidad popular con estricta rectitud eclesial, no solo atendiendo a las medidas sanitarias gubernamentales del orden civil, todos los participantes llevaban su “papeleta de sitio”, sino del objeto primordial de esta salida extraordinaria procesional de la imagen cristífera, autorizada por la autoridad eclesiástica, que es dar testimonio público del gran Misterio de la Fe, recordando a cuantos se han acercado, que esa “Tercera Caída” del Vía Crucis forma parte del itinerario de Jesús en su Vida, Pasión y Muerte, y Resurrección, constituyendo el modelo de vida del cristiano y como valor añadido del cofrade, comprometido a seguir al Maestro en la vía de la Cruz a pesar de las grandes tribulaciones a las que estamos actualmente asistiendo y viviendo con inmensa amargura.
El paso procesional, andas con la dirección de los portadores por parte del distinguido capataz de Pasión Juan Sagredo Alonso, fue adornado floralmente con exquisitez para esta procesión religiosa de carácter especial, realizado por la Floristería Gracia&laPenca, y constaba de rosa spray roja, clavel colombiano púrpura, rosas rojas, gerbera mini púrpura, cardo, crisantemo y alstroemeria, así como, las marchas procesionales que fueron interpretadas a lo largo del recorrido salieron de los instrumentos musicales de la afamada Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora del Carmen de Almería, bajo la dirección orgánica de Francisco Javier Fernández Casado y como subdirector Mario Lara Hernández y la dirección musical de Ignacio José García Pérez y el asesor musical Enrique Pérez Martínez.
Momento singular durante el recorrido, al igual que es tradicional cada Lunes Santo con la llegada del cortejo procesional al Santuario de la Virgen del Mar Coronada y Alcaldesa Perpetua de Almería para en comunión eclesial ser recibidos por los Reverendos Padres Dominicos y representantes de la Hermandad patronal, por ser necesario siempre la visita a la Madre de todos los almerienses, por profundo significado religioso y espiritual que tiene nuestra Virgen del Mar para toda la diócesis de Almería, ya que decir, Virgen del Mar es decir fe en su Hijo Jesucristo, Único Salvador del Mundo, es decir amor a Dios y cumplimiento de sus Mandamientos.
Otro lugar emblemático, fue su paso por la calle Navarro Rodrigo y discurrir frente al Palacio de la Diputación Provincial de Almería, sede la Corporación Provincial presidida por Javier Aureliano García Molina que con su Diputado de Cultura Manuel Guzmán de las Rozas y demás capitulares provinciales siempre han testimoniado el homenaje de toda la provincia al “Señor de Pasión”. Pasando la iglesia de la Compañía María, el cortejo cogió el itinerario de la Avenida Federico García Lorca, que entre frondoso arbolado y palmeral, llegaban a estampar una bella imagen de un claustro abovedado conventual. Cofradía penitencial muy vinculada al Benemérito Cuerpo de la Guardia Civil de Almería al ser la Comandancia de Almería hermanos honoríficos y participar asiduamente en la Estación de Penitencia, al igual, que la Autoridad Portuaria. Presente en el cortejo procesional el presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías Isaac Vílchez y representantes de otras corporaciones cofrades de la capital, con especial prelación a la Real, Ilustre y Sacramental Cofradía del Prendimiento, que son Padrinos de Honor de la fundación de la Cofradía de Pasión.
El indaliano cielo almeriense se cerró a la luminosidad del “Sol de Villalán” o “Portocarrero”, y casi a punto de doblar la media noche del sábado al Domingo del Señor con la brisa marina de mar Mediterráneo, el Señor de Pasión regresó entre marchas procesionales penitenciales a su sede canónica en el Barrio de Oliveros para ocupar la capilla lateral derecha en el templo parroquial conforme al Sagrario para seguir recibiendo la veneración de creyentes y no creyentes, cofrades o no cofrades, y recibir su misericordia y compasión.
Fuente: Rafael Leopoldo Aguilera Martínez