Cáritas pone en marcha un proyecto cooperativo para reutilizar, administrar y comercializar ropa usada
Cáritas Diocesana ha presentado este jueves su proyecto textil ‘Koopera’ con el que pretende cualificar la utilización de la ropa donada que recibe desde criterios de dignidad, eticidad, transparencia y beneficio para las personas en riesgo de exclusión o excluídas que acompaña.
El delegado diocesano de Cáritas Almería, Juan Antonio Plaza, junto con el director, Andrés Asensio, y la subdirectora, María del Carmen Torres, han dado a conocer esta empresa que trata de “dignificar la atención y la ayuda que se está prestando a las personas que acompañamos” mediante un nuevo sistema que además prevé dar empleabilidad al colectivo.
Según ha explicado Asensio, el proyecto asegura que toda la ropa donada “tenga un uso ético una vez pasado por un exigente proceso de higienización y etiquetado” de forma que el diez por ciento de la ropa recibida se pone a disposición de las personas sin posibilidades económicas.
Así, otra parte de ese diez por ciento se pondrá a la venta a través de una tienda de ropa donde las familias sin recursos “podrán acudir en igualdad de condiciones que el resto de la población”. Mientras, la mitad de la ropa recibida se enviará a Cáritas de otros países con más necesidades, como es el caso de Chile o Rumanía.
Por otra parte, se prevé que una tercera parte de las donaciones sea destinada a la industria colchonera mientra que lo restante, aquello que no se pueda utilizar, se emplee como “materia energética de combustión”.
De esta manera “se descartan cualquier sospecha sobre el destino final de todo lo que la gente con buena voluntad dona y, por otro lado, siguiendo directivas de la Unión Europea, se gestiona el reciclado de la ropa desde un respeto absoluto al medio ambiente”, ha apostillado.
Torres ha señalado así que un “pilar fundamental” para poder ejecutar el proyecto pasa por firmar convenios de colaboración con los ayuntamientos de la provincia para instalar contenedores de recogida de ropa. “Hasta ahora Cáritas Diocesana se ha puesto al habla con diferentes consistorios recibiendo una respuesta inicial muy positiva”, ha dicho.
No obstante, desde la Dirección de Cáritas aún se mantienen prevenciones hacia el resultado final de dichas conversaciones si en las mismas los ayuntamiento deciden primar su beneficio económico por la instalación de dichos contenedores sobre el beneficio sobre las personas que tendrá el Proyecto de Cáritas.
“Cáritas no está en condiciones ni es su interés competir económicamente por la consecución de las licitaciones; si algo hace Cáritas es devolver a los ayuntamientos y las administraciones su colaboración en forma de inclusión de personas en la sociedad, de aminoramiento de la miseria y la precariedad con la que muchos ciudadanos viven y, ahora, con la creación de puestos de trabajos para un grupo de ellos”, ha recordado Asensio.
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