Willy Toledo se va a Cuba
“Toledo se va a Cuba, país socialista del cual el socialista habla socialistas maravillas”
Impagable anuncio del actor Willy Toledo, realizado en la Venezuela de Maduro, el que habla con los pajaritos y cuyas “ejemplares” huestes se dedican a golpear a los diputados de la oposición en la sede de la soberanía venezolana.
El caso es que el actor, conocido no por su trabajo sino por su simpatía hacia toda causa de extrema izquierda que se precie, se va a ir a vivir a La Habana de los hermanos Castro. Toledo, pues, se va a Cuba, país socialista del cual el socialista habla socialistas maravillas. Sin duda la ceguera ideológica, como bien recordaba Jean François Revel, es enfermedad muy grave. Recuerden que hubo quien al regresar de viaje turístico por la Rusia de Stalin contaba las excelencias de su sistema político, mucho mejor según el cegato que el de los países capitalistas, en donde la gente, qué asco, tiene la mala costumbre de tener propiedades y libertades individuales.
Según Toledo, quien lo mismo es que va a Cuba a hacerse someterse a una operación de estética a un centro de lujo para turistas, porque ya se sabe que para el pueblo cubano no hay ni tiritas, el sistema de salud cubano es una maravilla. Lo mismo que el sistema educativo. Le ha faltado decir que en Cuba no existe el paro. Ni en Corea del Norte, oiga. ¡Paraísos socialistas!.
Contaba Toledo sus intenciones de expatriarse voluntariamente entre críticas contra un “neoliberalismo” salvaje y ultra, no sé si me he dejado algún adjetivo, que en la España hiperregulada de las 100.000 leyes y el crecimiento continuado del peso del Estado en la economía, por supuesto que no se ha conocido nunca. Por desgracia y por mucho que él se empeñe.
No me sorprendieron las loas de Toledo a gentes como los Castro, Hugo Chávez –se le pasó felicitar por sus grandes logros al gran líder norcoreano- e incluso a la basura etarra. Sí sin embargo, debo decir que me decepcionó que no alabara la gestión de Cristóbal Montoro, quien nos ha subido los impuestos más de lo que pedían los propios comunistas. Sin duda fue un olvido. Subsánalo, Willy.
En todo caso, quiero aprovechar la ocasión con esta columna, para desear un feliz viaje al señor Toledo. Y ya que estamos, animarle a que invite a irse con él al paraíso socialista cubano a toda la patulea titiritera, acá dícense artistas, y a todos los que, como él, odian la libertad y defienden una sociedad de amos y esclavos.
-Almudena Negro-
Puedes seguir las respuestas de esta entrada por el RSS 2.0. Puedes ir al final y dejar una respuesta. Pinging no esta permitido