El abandono de Calar Alto
A la larga lista de desprecios del Gobierno central hacia Almería, esta semana podemos sumar uno más: el que ha recibido la joya científica de la provincia, el Observatorio Astronómico de Calar Alto, después de que el Ejecutivo de Rajoy haya confirmado que le retira el 67% de la financiación.
Durante meses, el Gobierno del PP se ha dedicado a intoxicar a la opinión pública almeriense con informaciones poco ajustadas a la realidad, como que gracias a las gestiones que se estaban haciendo, el futuro del centro iba a estar asegurado hasta 2018. Ahora que finalmente se ha firmado el convenio con Alemania, ha salido a relucir la triste verdad. Este convenio es cierto que fija las condiciones de financiación del centro hasta 2018, pero lo importante es que contempla una reducción de su presupuesto de más del 67%, lo que en la práctica no significa asegurar la continuidad del centro, sino más bien todo lo contrario: estamos ante una muerte programada.
Este recorte significará un frenazo en seco a la actividad investigadora que se realiza en el Observatorio. Además del despido de decenas de trabajadores, dos de los tres telescopios de Calar Alto dejarán de estar en uso, lo que, inevitablemente, reducirá su valor como centro de observación.
Poco ha importado en el Ministerio de Economía y Competitividad el rico expediente científico del Centro Astronómico Hispano Alemán, ni el prestigio que había conseguido la provincia de Almería por albergar este observatorio y poner a su disposición un cielo de los que en Europa quedan verdaderamente pocos. Poco importa en Madrid que la ciencia en España se esté convirtiendo en la sombra de lo que fue a fuerza de recortes, y poco importa que en Almería seamos legión los que creemos en el futuro de Calar Alto.
El ministro De Guindos tenía su hoja de ruta y ni siquiera se ha preocupado en buscar alternativas al brutal recorte. No le preguntó a la Junta de Andalucía, ni a la Diputación, ni a los ayuntamientos qué les parecía el ‘cierre encubierto’ del centro, ni si estaba en su mano aportar algo. El tijeretazo sin contemplaciones es mucho más fácil.
Está claro el futuro que quiere el PP: para la ciencia española, que se limite a ser colaboradora de lo que lideren otros; para la provincia de Almería, que vuelva a ser aquella provincia olvidada. Pero no nos resignaremos. Somos muchos los almerienses que estamos dispuestos a luchar por tener voz y por tener futuro.
-Juan Carlos Pérez Navas-
Senador PSOE Almería