EL IMPARCIAL.- La ley Pajín permitirá al Gobierno controlar las empresas
Lo que ha aprobado el viernes el Consejo de Ministros es el Anteproyecto de Ley Integral para la Igualdad de Trato y la No discriminación. Actuar es elegir y, por tanto, discriminar. Pensar es discriminar y poco más. La discriminación, en el ámbito privado, lo es casi todo. Pero el Gobierno lo define como algo condenable y por esa vía se inmiscuye en cualquier ámbito de decisión estrictamente privado. Incluyendo, claro está, el de la empresa. Además, la carga de la prueba está en el denunciado. De modo que si una empresa decide no contratar a un trabajador, éste puede denunciar a la empresa si considera que ha sido discriminado. Puede alegar que ha sido discriminado por ser mujer. O por ser hombre. O por ser demasiado mayor. O por ser extranjero. O por cualquier otra razón que considere.
Será la empresa la que deba probar su inocencia. A base de multas de 500.000 euros, puede hacer mucho daño, e incluso obligar a cerrar, a prácticamente cualquier empresa. Así que mejor será no enfrentarse al Gobierno. Un aviso a cualquier medio de comunicación, en particular. LibreMercado tiene más detalles.
Todavía en nuestro país. Recientemente se pasó por España Bob Diamond. Parece el dombre de un cantante, pero es el director de Barclays, que hizo una visita al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. ¿Para qué? Para comprar un banco, nada menos. Según la BBC, Barclays “está considerando la compra de un banco regional español”. ¿Quiere decir ello la compra de una caja? Serían buenas noticias. Hasta cierto punto, porque Barclays quiere garantías de que no se hará responsable de ninguna deuda histórica.
El FT, en un nuevo artículo sobre España, éste con los “indignados” en el título, dice: “Hoy muchos foráneos ven al país como el siguiente en el dominó europeo, el miembro más vulnerable a una restricción crediticia que le forzaría a seguir a Grecia, Irlanda y Portugal y buscar el rescate de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional”. Y señala que la última institución en plantearse la expulsión de España del euro es el banco francés Natixis. Aunque FT cree que nuestra situación no es tan débil como la de los otros tres socios rescatados.
De los indignados toma nota que lanzan su confusa furia contra una amalgama compuesta por los mercados y las instituciones internacionales. Del “poco carismático pero competente” Mariano Rajoy dice que no ha desvelado su programa para sacar al país de la situación que vive. Pero “la mayoría de los economistas creen (…) que un gobierno del PP forzaría una liberalización más radical del mercado de trabajo y tomaría otras medidas que incrementarían la competitividad”.
Grecia está solucionando su problema de deuda… engañando a todo el mundo y todavía muy lejos de hacer los recortes necesarios. El portavoz del G8, reunido estos días, ha insistido en que “especialmente por lo que se refiere a los problemas de deuda de Grecia, muchos líderes han expresado la visión de que es importante que Grecia trabeje más en la reforma fiscal, y que debería colaborar más con el FMI en este asunto”. El FMI tiene también su propio dilema entre renunciar a sus estándares para conceder ayudas o abandonar a Grecia a su suerte.
Claro, que tiene también otras opciones. Según el miembro del consejo del BCE Juergen Stark, Grecia podría conseguir más de 300.000 millones de euros gracias a las privatizaciones. El actual plan griego prevé unos ingresos de 50.000 millones, pero Stark señala que “El gobierno griego tiene acciones de empresas y posee bienes inmobiliarios. Los expertos estiman que las ventas de todo ello podrían alcanzar los 330.000 millones de euros”.
Todo el mundo sigue con interés la carrera por suceder a DSK (una carrera que se parece a las primarias del PSOE, con un único candidato real), pero el FMI tiene también otros problemas. Como la misteriosa desaparición de nada menos que 230 toneladas de oro. Como recuerda The Market Oracle una tonelada son 150.477 onzas troy, y cada una se vende por un precio que ronda los 1.500 dólares. 230 por 150.477 onzas son 34.609.710 onzas. Que multiplicadas por 1.500 dólares son 51.913 millones de euros.
La principal cita de la semana que comienza es la reunión del BCE. Danske prevé que su gobernador, Jean Claude Trichet, utilice la expresión “fuerte vigilancia”, lo que preparará al mercado para una subida de tipos en julio.
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