2-1: El Almería cae con las botas puestas ante el líder… pero otra derrota más.
El Almería cayó con las botas puestas en su visita al líder, Cádiz CF, en un partido en el que los rojiblancos compitieron hasta el final, mereciendo no perder. Incluso se adelantaron en el marcador muy pronto, pero también se colaron en propia puerta el 1-1. En el segundo tiempo hubo alternativas, con más balón del conjunto almeriense y ocasiones, pero fueron los gaditanos los que supieron aprovechar las suyas. Son ya seis la jornadas sin vencer.
José María Gutiérrez puso en liza un once con numerosas novedades con respecto a la jornada anterior; las bajas, las altas y las características del partido, le llevaron a ello. En este sentido Balliu e Iván Martos fueron los laterales; en el doble pivote César de la Hoz acompañó a Aguza; en el extremo izquierdo se situó Appiah y en la media punta Vada. Por lo demás, los mismos que contra el Fuenlabrada: Fernando en la portería; Maras y David Costas como centrales; el citado Aguza en la medular; Corpas en la banda derecha, y arriba Darwin Núñez.
Con este once el Almería afrontaba un encuentro de máxima exigencia e importancia en la lucha por el ascenso. Después de cinco jornadas sin ganar, estaba obligado a sumar, pero delante estaba el líder, que venía de dos derrotas consecutivas.
El Almería salió muy sobrio y a pesar de lo mucho que se jugaba, se mostraba tranquilo, con confianza en sus posibilidades, y poniendo criterio en su juego. Como consecuencia de ello, en el minuto 10 Corpas ponía el 0-1 tras una jugada bien trenzada de Vada, Aguza y Darwin Núñez que la puso dentro del área para que el jiennense resolviera después de un primer rechace del meta local. Sin embargo en el 16 empataba el Cádiz con un gol en propia meta de Maras al intentar despejar un centro desde la izquierda.
A partir del 1-1 los rojiblancos perdieron el control y eran los gaditanos los que tenían la posesión y mayor opción en el juego porque a nuestros representantes, al contrario que al inicio, les costaba tener el balón. En cualquier caso defendían bien y mantenía a raya a su rival. Con esta dinámica se llegaba al descanso.
El Almería comenzó muy bien el segundo tiempo hasta el punto que llevaba la iniciativa y llegaba arriba una y otra vez, aunque sin generar demasiado peligro, pero el encuentro estaba siendo un monólogo de los rojiblancos. Sin embargo, una rápida acción cadista por la derecha, en el 59, supuso el 2-1 de Alex Fernández, que remataba en el primer palo un centro de Salvi. Un mazazo.
Pero el conjunto almeriense reaccionaba y en el 61 Jonathan Silva, que acababa de salir al terreno de juego en sustitución de Appiah, mandaba al larguero. Ahí pudo estar el empate dos minutos después. José María Gutiérrez ponía en liza a Juan Muñoz en el 62 para reforzar el ataque y buscar el gol. El Almería le ponía casta y mandaba, algo que no incomodaba a los locales, más cómodos jugando a la contra.
Pero los minutos pasaban y el resultado comenzaba a pesar mucho en la UD Almería, y eso se notaba en su fútbol porque pese a tener al pelota, actuaba más con el corazón que con la cabeza. Aun así seguía creando peligro. Habría un tercer cambio con el debut de Francis Guerrero para suplir a Iván Martos y oxigenar el lateral zurdo, por donde entraba Salvi como un estilete.
El Almería lo seguía intentando; competía y no se rendía en ningún momento, pero el Cádiz se hizo fuerte atrás y fue imposible batirle.
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